Todos queremos establecer relaciones donde nos sintamos libres de ser auténticos y podamos crecer sin restricción. Pero estas no llegan por suerte, también pasan por un proceso de construcción para lograrlas.
El anhelo de una buena relación tiene que diferenciarse muy bien de la necesidad, porque esta última es energía de escasez. Cuando estás en carencia, atraes dependencia, no libertad.
Y eso puede representar un verdadero problema. Para evitarlo tienes que sentirte completo y suficiente, para saber rechazar todo aquel que te ofrezca migajas en vez de compromiso.
No importa qué tipo de relación sea, todas se manejan en la misma energía. La confianza es una sola que se manifiesta en diversas formas. Es por esto que te muestro los errores más comunes que se cometen al intentar crear confianza.
Lo que debes evitar en tus relaciones de confianza
#1 No estar dispuesto a que el tiempo consolide las bases de la relación: la confianza se asienta a través del tiempo. Querer dar y recibir todo desde el primer instante, es un riesgo que puede costar mucho. Date el permiso de que el tiempo revele el nivel de compromiso de la otra persona y expandan los límites juntos, respetando el beneficio en ambas partes.
#2 Querer que la otra persona responda como tú quieras siempre: no hay nada que debilite más una relación, que pretender dominar al otro. Cada vez que quieres que alguien se comporte distinto, estás rompiendo con la confianza de ser en libertad. Si no te sientes a gusto en la relación, despréndete con amor y busca un mejor lugar. Siempre será más saludable que querer que la otra persona cambie.
#3 Considerar que una buena relación solo se basa en lo que te agrada de la otra persona: de lo bueno y lo bonito todo el mundo quiere, sin embargo, la solidez de una relación se mide en las diferencias. Cuando logras responder desde el respeto a ellas, entonces estarás consolidando una interacción en confianza.
Las relaciones son procesos para desarrollar la colaboración, trabajo en equipo y la socialización. Sin confianza, estás pueden representar una experiencia tóxica y de perjuicio.
Elige en función de tu bienestar, porque intrínsecamente estarás apostando al beneficio del otro. Usa como criterio para cultivar tus relaciones, que la persona con la que elijas interactuar tenga los mismos valores que tú.
Desde allí, no importa que tan diferentes sean, siempre los unirá un mismo propósito. Construye la confianza para dar y recibir más, atrévete.
Artículo: «Aprender a interactuar con los demás»
Ver también ¿Qué debo aprender de mis relaciones de trabajo?