Seguro haz escuchado o afirmado que donde hay solo mujeres, habrá chismes y problemas. Probablemente recuerdes también todos los cuentos, sobre madrastras y hermanastras malvadas. También sobre reinas celosas de la belleza de otra, dejando grabado desde muy temprana edad en nuestro subconsciente que debemos rivalizar unas con otras. Que debemos desconfiar entre nosotras mismas. Pero hoy conocerás los beneficios inmediatos de practicar la sororidad.
Estoy segura de que habrás visto la típica escena de la chica “más linda” o “más admirada”. Y que para mantener su posición top, es cruel con todas las demás. Incluso con las que hace llamar sus amigas. O la infinidad de chistes y películas de suegras que odian a sus nueras y viceversa. La mayoría de las mujeres vemos todo esto con naturalidad. Algunas hasta hemos sostenido que preferimos interactuar más con hombres que con mujeres.
¿Quién pierde con esto?
La humanidad entera se ve afectada, por tener mujeres renegando de sí mismas. Queriendo ser “menos mujeres” y “más hombres”. Desconociendo sus dones y talentos esencialmente femeninos, negándose su comunicación con lo invisible y sutil. El mundo necesita que sanemos la energía femenina que sostiene la vida. Y esto solo se puede lograr viendo a cada mujer no como una contrincante, sino más bien como una amiga, una hermana.
Ayudar a otra mujer por el simple hecho de ser mujer, es auto reconocernos, auto valorarnos. Es desprendernos de los dogmas que nos hicieron creer que para yo ser/brillar, es imprescindible que la otra sea menos, brille menos. Durante miles de años nos han señalado, perseguido, quemado, vendido, violado. Nos aislaron unas de otras, porque sabían que juntas éramos mucho más fuertes.
¿Cuáles son los beneficios inmediatos de la sororidad?
Si eres mujer y comienzas a practicar la sororidad, tendrás beneficios inmediatos y tangibles:
- Comenzarás a tejer a tu alrededor una red de apoyo: cuando ayudas a otra mujer desinteresadamente, ella estará agradecida y querrá ayudarte de igual manera cuando tú lo requieras. Y como en el universo nada se pierde, si no es la misma mujer será otra que tenderá la mano.
- Tu autoestima se va a revitalizar: ya que reforzarás el hecho de que eres un ser increíble y completo, que no te hace falta que otra/o sea menos para tu brillar. Porque al reconocer las virtudes de otras mujeres, las estarás reconociendo en ti misma, porque todas somos una.
- Te volverás más empática: para practicar la sororidad, es imprescindible practicar la empatía. Ese ponernos en los zapatos de otros para comprenderlos, para sentirlos. Respetar que pensemos distinto, que seamos diferentes y aun así poder unir nuestras fortalezas para el logro de un objetivo mayor.
Si eres hombre, puedes comenzar por honrar la energía femenina en tu vida. No se trata de hombres o mujeres, porque realmente ambos nos necesitamos, si pretendemos seguir poblando la Tierra. Finalmente, todos y todas somos uno, ante la divinidad. Aprovechemos los beneficios inmediatos de la sororidad.
Ver también Lo que manifiestas habla de ti