Quieres cambiarlo todo o lo más que puedas, pero te resistes a hacerlo. Una incongruencia que te está costando ver materializada una mejor forma de vivir. El cambio es positivo siempre desde mi punto de vista, porque aunque te encuentres con resultados no deseados, te acercas a descubrir quién eres en realidad.
Para saber elegir tiene que existir el contraste, de lo contrario no sabrás identificar qué tienes ante ti. Me refiero a que los eventos de cambio son para que pruebes los dos lados de la moneda y así a través de la experiencia, determines cuál es el que te proporciona mayor beneficio.
Es momento de que relajes la resistencia al cambio, hacer las cosas diferentes no es perder, es encontrar una mejor forma de hacerlas. Es por esto que te presento los siguientes indicadores, que harán que empieces a ver tus cambios como un proceso positivo en la vida:
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Tienes nuevas experiencias
Todo lo nuevo aporta, te es útil para comparar tu pasado y tu presente, para elegir con qué quedarte. Solo lo que haces distinto te trae nuevos resultados, así que no temas en probar nuevos caminos. Jamás representará una pérdida, en el peor escenario te indicará lo que no te agrada.
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Te hace adaptable
En cada nueva circunstancia hay un período de adaptación, necesario para que te ajustes a las nuevas condiciones. Esto es para moldear tu rutina a lo nuevo y sentirte a gusto en el nuevo ambiente. Lograr hacer conscientes los cambios, te perfeccionará en la adaptabilidad, reduciendo el tiempo necesario para aceptar con agrado los nuevos acontecimientos.
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Te ayuda a manejar la incertidumbre
No saber qué pasará, le causa estrés a mucha gente que no logra expandir sus perspectivas. La realidad es que si quieres conocer tu futuro, fíjate en lo que haces ahora. Una incertidumbre mal manejada puede llevar al colapso mental de una persona. Si estás presente en tus procesos de cambio, te enfocas en tus recursos y habilidades, en vez del deseo de que todo cambie a tu juicio.
El cambio es lo único constante de la vida, pretender que sea diferente, es luchar para no ganar. Siempre aporta en tu vida, si no lo ves es momento de que entrenes para hacerlo. Expande tus pensamientos y creencias para que puedas disfrutar de sus beneficios. En el cambio está el crecimiento.
Observa qué beneficios te han traído los grandes cambios de tu vida y pregúntate si habrían sido posibles sin ellos. No temas a lo que es diferente, simplemente se te está presentando la oportunidad de romper patrones que no te dejan avanzar. Activa tu liderazgo interior para que aprendas a ser, sentir con el propósito de servir y crear evolución en propia y ajena. Ya tienes todo lo necesario para conseguirlo.