Discernimiento, voluntad, disciplina, orden, acción, servir de ejemplo. Piensa en cada una de estas palabras y siéntelas. ¿Qué experimentas al evocarlas? ¿En qué parte del cuerpo las sientes? ¿Cómo te hacen sentir?¿Significan algo para ti?
Un día hablaba con mi maestra de yoga y le comentaba, que estaba cansada. Que sentía un gran peso que no me dejaba avanzar. Parecía que repetía una y otra vez aquello que yo creía que me hacía sentir mal. Sencillamente estaba estancada, que sentía apatía, desinterés y falta de voluntad. Ella siempre paciente, cauta, me miraba con sus ojos lleno de compasión y amor. Me invitó a practicar una asana de yoga (postura corporal), Dhanurasana, el arco.
El Arco
Y entonces me dijo, imagina que eres un arco. Originalmente los arcos fueron creados para cazar y/o para la defensa. Esta herramienta necesita utilizar la fuerza y la tensión apropiada. Y mediante la extensión de la cuerda puedes lanzar la flecha sin llegar a romper la estructura del arco. Para luego alcanzar un objetivo concreto, parece increíble, ¿no te parece?, dijo ella. Pero yo no
entendía qué me quería decir o exactamente a donde quería llegar. Entonces continuó. Es el mismo principio que se utiliza para afinar un instrumento musical. Fuerza y tensión, y esta es la misma base para realizar la postura del arco.
Equilibrio
Encontrar el equilibrio correcto bajo la intensidad del esfuerzo, es uno de los desafíos más interesantes que encontramos en lo cotidiano. Llegar a tener la capacidad y la habilidad de realizar una acción. Influir sobre algo o alguien. Es la capacidad de poder que llevamos dentro. Que al activar la energía de la acción en sintonía a la intensidad del esfuerzo correcto en equilibrio con lo que ya eres, te dará la respuesta a estas inquietudes que me presentas, dijo ella.
Cada flecha al ser lanzada requiere una fuerza, una dirección y un objetivo. El arco proporciona la estructura necesaria para cumplir la función de dicha flecha. Allí entendí a qué se refería mi maestra. La mente se abre con nuestro cuerpo, en ocasiones aquello que no nos deja avanzar. La sensación de falta de fuerza o falta de acción, sentirnos apagados, es como llevar un gran peso encima. El arco es amplitud, presencia, confianza, la manifestación del ser como parte integrada del todo. Se siente una sensación de confianza, seguridad, voluntad, estabilidad y potencia que sobreviene. Para manifestar todo el esplendor del propio ser.
El hombre es dueño de su propio destino. Tú mismo, por el poder de tu pensamiento, creas tu destino. Pero puedes anularlo si quieres. Todas las facultades, energías y poderes están latentes en ti. Desarróllalas y hazte libre y grande.
Swami Sivananda
Poder Interno
El poder de la acción, de la intensión, del pensamiento están en ti. Quiero agregar que los “No Puedo” en la actualidad están a la orden del día. Sin embargo, tienes el poder de convertir este pensamiento en un “Hasta aquí puedo en este momento”. Sin juicios. El Poder está en ti, ahora siéntelo. Experiméntalo y sobre todo disfruta de saberte un ser consciente capaz de transformar todo aquello que haces, dices, piensas y sientes para tu más alto bien.
“Los no puedo no existen, hasta aquí puedo en este momento”
Ysabel Viloria
Escrito por
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