El viejo dicho te recuerda que la unión hace la fuerza. Fraternidad y sororidad no son más que formas específicas de hermandad. La fraternidad es bien conocida porque venimos desde hace miles de años viviendo bajo una influencia patriarcal muy grande que ha perpetuado las fraternidades. Los “Fray” en el sentido religioso y la unión y colaboración masculina. Pero los tiempos están cambiando y un neologismo que antes no se escuchaba en el habla hispana se ha vuelvo muy común, la sororidad.
Este término que no tiene nada de nuevo, se escucha frecuentemente en los Estados Unidos en la gran mayoría de las universidades. Estas cuentan con “sororities” desde hace muchísimos años. Las hermandades femeninas de las universidades se hicieron famosas con el fin de vivir más experiencias sociales. Cuando en realidad la palabra del latín de la que viene etimológicamente sorority –soror que significa hermana, tiene un sentido más amplio y no está ligada a ninguna experiencia específica de aprendizaje.
Entre nosotras hoy en día la diferencia se está haciendo sentir. Ahora muchos diccionarios incluyen el término sororidad específicamente para promover una nueva forma de apoyo entre las mujeres. Si recuerdas las hermanas o monjas de los colegios católicos eran “Sor”. De ahí viene la recolección más significativa que probablemente tienes, ya que Sor significa hermana.
En este momento en el que la palabra viene despertando esta nueva energía entre las mujeres, comprometámonos para que no se quede solo fomentando un feminismo barato. Recuerda que las palabras tienen una carga energética. En gran parte, debido a la forma cómo las usamos y el poder que les damos. Por eso cuando hables de hermandades femeninas no te refieras solo a uniones y ayuda entre mujeres “en contra a ”. Porque ahí estaríamos cayendo de nuevo en el error de excluir y generar resistencia en vez de unificación lo cual ayuda a todos.
La experiencia nos muestra que cuando pensamos en grupos, identificaciones de acuerdo a raza, sexo o ideologías volvemos a caer en el viejo paradigma de la separabilidad. Nos vemos diferentes unos de los otros. Y con esta idea en mente decidimos quién puede ser parte de algo o no, a quién ayudamos o no, a quién escuchamos o no.
Hermandad femenina
Hermandad significa unión, y aunque obviamente esta unión es exclusiva del sexo femenino no quiere decir que la usemos como arma de antagonismo o lucha. Es más, se puede convertir en punto de unión y armonía que congregue a las mujeres. Ya que somos nosotras quienes específicamente vivimos ciertos procesos por el simple hecho de ser mujeres. Por ejemplo, en vez de crear una sororidad de negocios fundemos una sororidad de madres. Porque en la de negocios podemos incluir a hombres exitosos que nos enseñen muchísimo en este aspecto, pero en la de madres no hay cabida para hombres. El punto es crear unión y ayuda sin exclusión.
La energía del planeta está cambiando y comienzan nuevas ideas a resurgir que han estado en la oscuridad por mucho tiempo. Entre ellas todo lo relacionado con el papel femenino en la humanidad. Es evidente que el despertar femenino está ocurriendo a grandes pasos. La creatividad está aflorando, y nuestro reconocimiento como seres infinitamente sabios no se cuestiona más. Por eso recae sobre nosotras una gran responsabilidad, la de guiar y ser luminarias unificando y armonizando. Está en nosotras el poder de darle a la sororidad el verdadero significado y poder que engendra la palabra en sí.
Ver también 3 beneficios inmediatos si practicas la sororidad
Vídeo Sororidad
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