La gratitud es una emoción que te llena de suficiencia. Te involucras con ella cuando reconoces que la vida siempre te ofrece recursos para cada etapa, aún en las que te desagradan. Cuando se tiene un nivel de conciencia elevado frente al agradecimiento, incluso se da gracias hasta por lo que desagrada.
Esto quizás te suene extraño, pero es una confirmación de la creencia de que todo ocurre a tu favor. Esto no quiere decir que todo lo recibirás con alegría. Sin embargo, al llegar a ese punto, empiezas a aceptar las cosas como son con mayor fluidez.
¿Se te ha ocurrido agradecer por lo que no tienes? Si no lo has hecho te invito a hacerlo. Esto te ayuda a conectarte emocionalmente con eso que deseas, visualizarlo y asignarle un propósito en tu vida. Esto te sirve como herramienta de enfoque para que canalices tu atención y puedas materializar con mayor rapidez.
Herramienta de Creación
Agradecer es un puente de conexión entre lo que quieres y tú. Es algo así como sintonizar una frecuencia y quedarte allí hasta recibir alguna señal. Esto no es magia, tal y como te mencioné anteriormente canaliza tu energía. Para materializar se necesita una congruencia entre pensamiento, palabra y acción, es la única vía.
Por tal razón cuando logras enfocarte cada día al mismo propósito trabajas más eficientemente. Esto te lleva a la materialización de los resultados. El conectarte con tus anhelos más allá de la idealización te permite plantear actividades, que muy bien pueden ser pequeñas, pero que en sumatoria hacen la diferencia.
Lo puedes considerar un recordatorio diario o simplemente generar la sensación que te permita creer que ya está hecho. Sin importar la opción con la que te sientas más cómodo, lo cierto es que el agradecimiento te conecta a la riqueza de existir. Ya tienes todo lo que necesitas, solamente te falta aprender a dar buen uso a tus recursos.
Da gracias por lo que tienes y no des por sentado los beneficios con los que hoy cuentas, hay quienes no lo tienen. Hazlo por aquello que no te gusta, porque te está preparando para algo mejor y agradece por lo que vendrá, porque sin duda será lo mejor.
Se ha determinado que las personas felices tienen algún nivel de desarrollo espiritual, una forma sencilla y accesible de lograrlo es a través de la gratitud. Ofrenda una acción de gracias de corazón, no por interés, entrega al mundo todo lo que quieres recibir de éste.
Conecta con tu liderazgo interior y desarrolla tu ser con agradecimiento, siente la vida para que puedas crecer y sirve con amor para crear bienestar. Ya tienes todo lo necesario.