Tu presencia refleja tu vitalidad. Es el espejo de tu energía.
“Sin energía el cuerpo humano se siente sin vida.
La fuerza vital, el prana nos permite encausarnos para que fluya la energía y de esta manera experimentar la vitalidad con todos los sentidos”.
Ramiro Calle
Si realmente estás en disposición de sentirte con vitalidad, lee las siguientes palabras.
¿Eres consciente en qué ocupas tu energía?
Alimentación, respiración, descanso, sueño e impresiones mentales, son cinco de las fuentes básicas de prana o vitalidad, ¿lo sabías?
Durante todo el día estas ejecutando actividades varias. Realizando acciones que realmente ocupa mucho de tu energía. Estar delante del ordenador, respondiendo mensajes. Sumado a esto pensamientos recurrentes de lo que pasó o de lo que puede pasar, estando en el ayer y en el mañana.
¿Te has detenido a pensar en la cantidad de energía que esto ocupa? Comiendo de manera compulsiva, incluso bebiendo poco líquido. También con pocas horas de sueño, levantarte y sentir que prácticamente no has dormido nada. Tal vez sientes además tu respiración agitada, cansada y a veces hasta sin aliento.
Verdaderamente esto es agotador. Tu cuerpo, mente y alma no son capaces de soportar todo esto. Por tal motivo, te traigo varias invitaciones. Además, varias prácticas que te servirán para aumentar la vitalidad.
Tu presencia refleja tu vitalidad
Cultiva una atención consciente. Es el estado de presencia en cada acto que realizas, incluso en el no hacer se refleja en la presencia en la que te encuentras.
Armoniza cuerpo y mente. Purifica la sangre y proporciona equilibrio mental al relajar el cuerpo y la mente mediante la respiración.
Ahora bien, ¿Cómo haces esto? Viene la primera invitación, sonríe. Sí, sonríe. Haz hecho lo mejor que podías, con los conocimientos que tienes hasta este momento. Al sonreír elevará tu vibración y te hará sentir en armonía. Eso sí, procura sostener la sonrisa al menos unos minutos, sentirás sus beneficios casi de inmediato.
La actividad física te dará la oportunidad de estar en el presente. Permitiéndote liberar hormonas de estrés, miedo, desidia, apatía. Liberándote de las ataduras del sufrimiento.
Dentro de la práctica de yoga algunos ejercicios de flexión hacia adelante estimula el sistema nervioso, aumentando tu vitalidad. Cuando regulas tu propia respiración te permites incrementar la energía a la vez que calma tu sistema nervioso. Mientras más profunda, calmada y lenta es la respiración, mayor vitalidad la cual será sostenible durante el día.
Ahora bien, volvamos al momento presente,
¿Qué grado de vitalidad tienes en este momento?
¿Al final del día tienes vitalidad?
Cuestiónate estas preguntas desde la amabilidad y sin juicio.
Pero sobre todo quiero que te quedes con la de definición. La vitalidad se refleja en tu postura, en tu esencia es como el rocío de la mañana. Siéntela, mantenla y expándela. Que tu presencia irradie energía por doquier.
Ver también El arte de crear
Vídeo Yoga para la vitalidad
Ysabel Viloria